Amanece, voy a tu encuentro.
Saludan mis pies, sonríe mi cuerpo,
Te acercas, aún con respeto, improvisas una caricia tierna.
Ha pasado tanto tiempo.
Buscas mis huellas, juegas alrededor, dudas.
¿Serán de ella?
Son profundas y tú extrañas aquellas, tan livianas como eran.
Son profundas y tú extrañas aquellas, tan livianas como eran.
Soy yo, si.
Cargada de vida, que ya me pesa.
Momentos.
Un grano de arena, una cresta de espuma,
Una brisa que se transforma en viento
Amanece, vienes a mi encuentro.
Amanece, vienes a mi encuentro.
Un apasionado reencuentro. Abrazos
ResponderEliminarUn apasionado reencuentro. Abrazos
ResponderEliminarUn apasionado reencuentro. Abrazos
ResponderEliminarQuerida LIgia, gracias por tu triple comentario, en este caso este es un reencuentro con el mar, con la arena de la playa y el viento suave de la costa. Algo muy especial para los de tierra adentro.
EliminarAbrazos.